La Terapia de Parejas es definitivamente un arte. La pareja es tal vez la unidad que más sufre y que más ayuda necesita. Todos (as) queremos estar en pareja, todos (as) disfrutamos el estar en pareja. Estar en pareja puede ser una de las experiencias más edificantes para muchos; dentro de una pareja podemos sanar muchos dolores y también se pueden producri muchos dolores.

También, muchos (as) pensamos que la vida nos prepara o que todos (as) tenemos ideas sobre el tener pareja y estar en pareja. Sobre la pareja y el estar en pareja se debe producir mucha expectativa y mucha fantasía. Tenemos muchos deseos irrealizados sobre la o las parejas y las expectativas y las necesidades sobre la pareja son demasiado grandes.

La pareja debe ser un lugar de reunión, de encuentro, de ayuda, apoyo. Debe ser una realidad que cada día se construya sobre la base de realidades adultas y con espacio para poder ser juguetones (as). También es cierto que la pareja puede con mucha facilidad caer en una serie de patrones y ciclos negativos. Uno de los elementos que más determina el bienestar o malestar de la pareja es lo que cada quien, en la pareja aporta a la relación.

Las parejas son el cruce de dos historias y depende de cómo se narra cada historia individual. Si son historias de dolor, sufrimiento, resentimiento, engaño, miedo, infidelidad; así será la relación. Pues bien, parece claro que uno de los mejores aciertos para los miembros de la pareja es buscar ayuda, tanto como pareja, como a nivel individual.

Creo que el tiempo es cada vez más precioso y todos (as) debemos exponernos más a la realidad de buscar ayuda; al hecho de querernos confrontar con nuestras historias y de que querer revisarlas, reescribirlas y de crear nuevos argumentos basados en nuevas definiciones de amor, intimidad, pasión, convivencia.

Todas las parejas necesitan ayuda, las parejas heterosexuales con miembros del sexo opuesto y con parejas del mismo sexo. Nadie debe sufrir inecesariamente existiendo herramientas y posibilidades para ayudarnos.

La terapia de pareja es una intervención en conjunto: con los dos miembros de la pareja presentes y el terapeuta. En mis publicaciones hago mención del “terapeuta de pareja idóneo”. Un terapeuta de pareja idóneo es alguien especializado en la intervención en conjunto con la pareja y con toda la gama de problemas que suelen acompañar a la pareja; es una persona que ha pasado por una institución seria y que también haya pasado por horas (cientos de horas) supervisando con un grupo y a nivel individual.

¿Por qué es importante este punto del terapeuta idóneo? Es importante porque es la única forma de asegurarse que su inversión de tiempo, dinero y energía llegue a un desenlace que produzca alternativas útiles a la pareja; de otra manera, con cualquier terapeuta, el resultado de su inversión es suerte. Últimamente me preguntan por coaching para parejas, coaching es una herramienta muy puntual para lograr entender situaciones muy específicas que están atravesando personas, la mayor parte del tiempo vinculado a situaciones laborales, en cuanto a sus carreras; como cambios de carrera, nuevos emprendimientos y ese tipo de cosa.

La Terapia de Pareja es diferente, es poder tomar a ambas mentes: entenderlas y tomar la tercera mente, que es la mente de la pareja y también poderla entender. Esta primera evaluación da lugar a que la pareja se entienda, se descubra, logre traducirse qué cosas quieren y qué cosas necesitan sanarse para poder seguir adelante. La simplificación de estas ideas es una ilusión y un peligro para la pareja, por la sencilla razón que si la persona que cree que está frente a este proceso no sabe lo que está ocurriendo, la pareja corre peligro, ¿cuál es el peligro?, que su problema no sea solucionado y una situación que tal vez pudiera ser compleja pero rescatable, no se logre y la pareja quede a la deriva.