Ideas Prácticas para Parejas poco Prácticas

La idea de tener un blog sobre familias y parejas creo que debe trascender temas como los que uno leería en Selecciones® o revistas similares; sin restarle mérito a estas revistas, ¡ni a mi Blog! Pero de vez en cuando uno necesita una “receta de cocina”: paso 1, 2, 3… ¿Se entiende?

Yo creo en una serie de cosas sobre la pareja que en mi parecer y en mi trabajo, forman parte de una especie de ABC que toda pareja debe considerar, o debe atreverse a llevara a cabo. El único resultado es que se sientan bien.

Una de las cosas que pienso son culturales o que tienen que ver con cómo somos, o tal vez hasta forma parte de lo humano es:

1. Impartir culpa. Es decir, quién tiene la culpa y por qué. Esta situación suele ocurrir después de un “accidente” o algo que no salió bien, o algo que se olvidó. La persona que tiene la razón suele entrar en una modalidad “te lo dije”. Una vez que una de las partes comienza con este tipo de “dardos” suele parar después de un par de gritos o una pelea. Totalmente evitable. Todos somos humanos y somos capaces de equivocarnos, errar, olvidar.
2. Patrones. Como en el ejemplo anterior puede haber un patrón de olvidos y de errores, sí. Es común. Algunas personas tenemos que hacer grandes esfuerzos por recordar. Nuestro mundo nos lleva a que nuestra atención esté muy dividida. Los patrones tienen que ver con el hecho de que la mayor parte del tiempo sabemos qué detona una pelea, sabemos por qué él se enoja, por qué ella se enfada. La idea es usar esta información a favor de la pareja y saber si vale la pena la pelea.
3. Hablar de mi y lo que yo pienso. La mayor parte del tiempo en una pelea estamos enfocados en todo lo malo que hace la otra persona y la mayor parte del tiempo la pelea se trata de ganar. Si uno gana los dos pierden, elija bien. Si yo logro concentrarme en mi, en lo que siento y en lo que espero de ti, lo más probable es que mi mensaje pueda llegarle a la otra persona como lo que es, un pedido.
4. Comunicación efectiva. Siempre le digo a las parejas en las peleas hable lento. Hablar lento es la herramienta más fácil, económica y eficiente que existe; y la mayor parte del tiempo nadie la usa. Comunicación efectiva se hace en una serie de pasos: hable lento o trate de controlar su respiración, que sea estable, de preferencia lenta y con intervalos algo espaciados; sonría y sonría de verdad cosa que usted (esto es principalmente para el que habla) entre en una sintonía de bienestar, hágalo para que no sea una mueca o el sarcasmo se apodere de su gesto que es de invitar a estar bien; hable siempre de usted y pida lo que necesita. Evite calificativos, evite decir lo bueno y luego rellenar con lo malo.
5. Sarcasmo. Es el enemigo número uno en una relación y acaba separando a la pareja más de lo que creemos y no le prestamos atención a esto. El uso del sarcasmo y sus gestos lo aprendimos temprano, en el colegio, en la casa. Básicamente es una declaración abierta que “soy una persona mal educada e inmadura”. Ninguna pareja necesita sarcasmo, ni ninguna amistad. OK, que culturalmente estamos plagados de sarcasmo: verdad y es nuestro trabajo sacar a este intruso (precarista) de nuestras vidas.
6. Amabilidad. Sea amable, respetuoso, dígalo y hágalo con gestos y demostraciones físicas. Es impresionante como en la terapia las parejas en sus trabajos son extremadamente amables con tantas personas desconocidas, con personas que aborrecen o hasta con personas con las que ya han tenido un altercado y ante la pregunta ¿por qué es amable con estas personas? La respuesta es la misma: porque sino me botan (pierdo el trabajo). ¿No pasa lo mismo en la pareja? Si soy desagradable, ofensivo, hiero, insulto, ¿no acabo perdiendo lo que con certeza es una de las cosas más valiosas que han construido?
7. Postergue la pelea o la discusión. No sé si es la sangre latina, si es el caribe, si es el sol pero vivimos en una cultura donde “no te paso uno” y en seguida se presenta la situación, sale el comentario, la burla o la crítica casi que en seguida. Hay parejas donde casi ni se hablan y solo se escuchan las críticas de cosas que la otra parte dijo mal, pronunció mal, etc. Todo esto es abonar el camino al divorcio. Postergue la pelea. Pelee mañana. Pelee cuando está de buen humor, así la pelea es productiva. Muchas veces cuando logramos postergar la pelea acabamos no peleando. Ahora, postergar es prima hermana o siamesa de “evite el resentimiento”; la idea es evacuar, no tener el tema en baño maría esperando el momento adecuado para disparar el veneno. No. La idea de postergar es dejar que el olvido haga su trabajo.

Son puntos sencillos. Podrían ser más puntos, creo que son bastantes y fáciles de aplicar. La idea de una receta es que sea fácil de seguir, que la podamos entender y que la podamos sostener.

Ahora, esto es muy importante: si, tratando de hacer alguno de los puntos de esta lista usted descubre que le cuesta mucho trabajo, que le surge una ira o una tristeza que no la puede explicar por los eventos que le están pasando en ese momento; es muy importante que visite a un Psicólogo idóneo y si es posible, visite a un terapeuta de parejas; también es un psicólogo y puede ayudarle con el malestar que surgiera realizando alguno de los puntos arriba mencionados. Suerte y saludos!